Hoy fue un día, que no podré olvidar…
Hace varios meses, trate de ver como podría contactar a una persona que por mas de dos años no había visto. Ustedes no tienen por que enterarse, pero fue “mi primer amor” (cuando tenia 13 años), de ninguna manera lo intente buscar por traumada o psicópata, quería saber como estaba, si aun seguía siendo el mismo idota que cuando tenia 14 años. Hoy al venir de casa de Sandra, lo vi, tarde 5 cuadras en decidirme, pero lo hice y me baje del microbus. No atinaba que decir y llegue diciendo un “hola flaco”, el se me quedo viendo por un momento y yo volví a hablar- “no me digas que no te acuerdas de mi” entonces llego ella, pero no me reconoció, después de un momento de incomoda espera, llegaron juntos a hablar conmigo, los dos de aspecto seguían iguales; aunque había algo en ellos, que hasta que me trajeron a casa pude comprender. Habían madurado mucho ambos… Se platicaron de tantas cosas y tantos recuerdos vinieron a mi mente, la raíz de mis traumas y miedos hoy fue, muy a mi manera enfrentada. Él estaba ahí enfrente de mi, platicando como si nada de este tiempo hubiera trascurrido, aun recuerdo las palabras mas sinceras que de él escuche: “extraño a mi papá, me hubiera gustado que lo conocieras”; de eso, en enero se cumplirán tres años y no puedo creer que rápido se ha esfumado el tiempo. Me doy cuenta que ya no soy la misma niña que se enamoro y creía todas las mentiras, que confiaba ciegamente. Me doy cuenta que a pesar de tener solo 16 años, he aprendido bien a madurar. Ellos tienen planeado casarse para finales del próximo año… Me sorprendí tanto, ver a ese niño que me daño con sus mentiras, o más bien con lo que no decía, ese niño se convirtió en un hombre…
¿Faltara mucho para que deje de ser una niña y me convierta en mujer?
