Que siempre hay algo que contar, por que ya había dicho que ningún día es igual. Que quiera escribir ya no es lo mismo. Pero hoy quiero contar nada mas cosas.
El otro día vi como se pelaban varios hombres en pleno centro, en media banqueta y después se fueron quitados de la pena como si nada hubiera pasado, fue chistoso el hecho de que hicieron lo que tenia que hacer y se marcharon. Le platique a mi padre y me dijo que eso era a lo que antes le llamaban un “tiro derecho” me ha encantado la expresión.
Yo decía que quería recuperar a viejas amistades y me esforzaría, hace un mes le mande un mail de felicitación por su cumpleaños a una persona, creo que espere demasiado de ese hecho como si pudiera redimirme con unas pocas letras y no sucedió nada, solo recibí una respuesta insípida. Hace unas semanas he vuelto a ser amiga de otra persona y como ambos hemos cambiado, creo que nos llevamos mejor que antes (que se infle tu ego por que te menciono en mi blog) y esa peripecia llego sola.
He estado re escribiendo una historia que invente hace varios años, me di cuenta que ahora si tengo la capacidad para redactar. Solo que no he tenido tiempo para inspirarme cuando estoy en casa y la computadora esta disponible.
Quiero cambiar mi plantilla, layaout o skin, como le digan a mi blog, lo voy a enchular de nuevo, próximamente.
La fotografía sigue llenando vacíos, consecuencia de mi falta de ganas de escribir. Tengo inspiración ciertas veces y pasan cosas que ameritan contarse, pero… no tengo ganas de escribir.
Ayer aprendí a hacer bufandas tejidas con gancho y este año pretendo hacer muchas para obsequiar en Navidad, por que deseo que este año cambie desde hasta dar obsequios en Navidad, hasta decir te quiero a mis amigos de vez en cuando. Y a pesar de lo que me dijeron por ahí, no estoy muy segura de que esto sea por que el tiempo nos come muy rápido y ya no falta tanto para irme.
El agua potable se nos fue arrebatada a la colonia desde el domingo al medio día y no llego hasta hoy por la mañana, solo duro tres horas y a las 11 de la noche volvió a fluir. Son las 3 de la mañana y yo, estoy lavando ropa. Espero que mañana no decida volver a irse, no hay nada como bañarse en casa.
Tengo ganas de un día desaparecerme e ir a vagar, pero siempre hay algo que hacer.
Me estoy obsesionando con las perforaciones en mis orejas, me he estado expandiendo la oreja derecha y pretendo ponerme argollas en el cartílago de esa misma oreja, como saben ya tengo una industrial y dos perforaciones normarles en la oreja izquierda. Según mi profesor de filosofía (que ahora me da etimologías los martes en la noche) tengo baja mi autoestima y lo reflejo en mis auto mutilaciones, pero le he dicho con una seguridad inmensa, que me amo mucho. Alguien mas me dijo que era una sádica. Yo digo que me gustan mis orejas y con aretes se adornan muy bonito. Perforaciones en el rostro no me haría, ni mucho menos tatuajes, así que, es solo mis ganas de lo que siempre quise por alguna excéntrica razón.
En fin, tarde mas dos horas en escribir esto, así que no piensen “no que no tenia ganas de escribir”.
Saludos a David y a todos, supongo.
El otro día vi como se pelaban varios hombres en pleno centro, en media banqueta y después se fueron quitados de la pena como si nada hubiera pasado, fue chistoso el hecho de que hicieron lo que tenia que hacer y se marcharon. Le platique a mi padre y me dijo que eso era a lo que antes le llamaban un “tiro derecho” me ha encantado la expresión.
Yo decía que quería recuperar a viejas amistades y me esforzaría, hace un mes le mande un mail de felicitación por su cumpleaños a una persona, creo que espere demasiado de ese hecho como si pudiera redimirme con unas pocas letras y no sucedió nada, solo recibí una respuesta insípida. Hace unas semanas he vuelto a ser amiga de otra persona y como ambos hemos cambiado, creo que nos llevamos mejor que antes (que se infle tu ego por que te menciono en mi blog) y esa peripecia llego sola.
He estado re escribiendo una historia que invente hace varios años, me di cuenta que ahora si tengo la capacidad para redactar. Solo que no he tenido tiempo para inspirarme cuando estoy en casa y la computadora esta disponible.
Quiero cambiar mi plantilla, layaout o skin, como le digan a mi blog, lo voy a enchular de nuevo, próximamente.
La fotografía sigue llenando vacíos, consecuencia de mi falta de ganas de escribir. Tengo inspiración ciertas veces y pasan cosas que ameritan contarse, pero… no tengo ganas de escribir.
Ayer aprendí a hacer bufandas tejidas con gancho y este año pretendo hacer muchas para obsequiar en Navidad, por que deseo que este año cambie desde hasta dar obsequios en Navidad, hasta decir te quiero a mis amigos de vez en cuando. Y a pesar de lo que me dijeron por ahí, no estoy muy segura de que esto sea por que el tiempo nos come muy rápido y ya no falta tanto para irme.
El agua potable se nos fue arrebatada a la colonia desde el domingo al medio día y no llego hasta hoy por la mañana, solo duro tres horas y a las 11 de la noche volvió a fluir. Son las 3 de la mañana y yo, estoy lavando ropa. Espero que mañana no decida volver a irse, no hay nada como bañarse en casa.
Tengo ganas de un día desaparecerme e ir a vagar, pero siempre hay algo que hacer.
Me estoy obsesionando con las perforaciones en mis orejas, me he estado expandiendo la oreja derecha y pretendo ponerme argollas en el cartílago de esa misma oreja, como saben ya tengo una industrial y dos perforaciones normarles en la oreja izquierda. Según mi profesor de filosofía (que ahora me da etimologías los martes en la noche) tengo baja mi autoestima y lo reflejo en mis auto mutilaciones, pero le he dicho con una seguridad inmensa, que me amo mucho. Alguien mas me dijo que era una sádica. Yo digo que me gustan mis orejas y con aretes se adornan muy bonito. Perforaciones en el rostro no me haría, ni mucho menos tatuajes, así que, es solo mis ganas de lo que siempre quise por alguna excéntrica razón.
En fin, tarde mas dos horas en escribir esto, así que no piensen “no que no tenia ganas de escribir”.
Saludos a David y a todos, supongo.