Hace un año que me gradúe del bachillerato y decidí no estudiar un tiempo, reforzar lo que quería de mi vida y experimentar otras cosas, como el trabajo, nuevos amigos y nuevas situaciones donde no involucrara la escuela.
Han pasado muchas cosas desde entonces he dejado de sentir muchas cosas y otras ahora las siento mas fuerte que nunca.
Hace un año que estaba enamorada y que no he vuelto a sentirme de esa manera. Hace un año, unos kilos, unos kilómetros y mil vidas ajenas unidas a la mía.
Estas últimas semanas sobre todo las he dedicado a encerrarme un rato en mi, me la he pasado con mi familia olvidada y la he pasado tranquila y hasta feliz en ciertos momentos. He pensado mucho, mas de lo que acostumbro y desecho por acá.
Estoy satisfecha con la decisión de una vida en Tijuana a pesar de mi ilusión por Guanajuato, no tengo miedo, ni nervios, pero siento que algo se quebrara a pesar del cuidado con lo que he cuidado, entrar en detalles realmente me es difícil, no es algo que haya hecho en este blog y dudo que algún día lo haga.
Cuando se publique este post ya estaré en Tijuana, desconectada algún tiempo del internet, del blog, del messeger, de la gente, incluso de mi familia. Duele en algún lado ser tan radical como soy, pero lo que no te mata te hace mas fuerte, uno vive como puede con lo que tiene, dando lo mejor de si, así viviré hasta donde pueda.
Creo que un cambio tan grande siempre repercute en algún lado y en mi caso solo será en las letras, escribiré en un cuaderno, tal vez un día venga a enseñarles lo que es de mi, no se cuando, tal vez mas rápido de lo que espero.
No sé que decir ciertamente, estoy pasando por tantas cosas que a veces no se compartir con las personas que estimo, ya lo he dicho aquí vengo a tirar todo y ahora estoy tirando mi año sabático, mi vida de preparatoria, mi hogar por diecinueve años, mis amigos, mis conocidos y muchas circunstancias de las que no es necesario hablar.
Han pasado muchas cosas desde entonces he dejado de sentir muchas cosas y otras ahora las siento mas fuerte que nunca.
Hace un año que estaba enamorada y que no he vuelto a sentirme de esa manera. Hace un año, unos kilos, unos kilómetros y mil vidas ajenas unidas a la mía.
Estas últimas semanas sobre todo las he dedicado a encerrarme un rato en mi, me la he pasado con mi familia olvidada y la he pasado tranquila y hasta feliz en ciertos momentos. He pensado mucho, mas de lo que acostumbro y desecho por acá.
Estoy satisfecha con la decisión de una vida en Tijuana a pesar de mi ilusión por Guanajuato, no tengo miedo, ni nervios, pero siento que algo se quebrara a pesar del cuidado con lo que he cuidado, entrar en detalles realmente me es difícil, no es algo que haya hecho en este blog y dudo que algún día lo haga.
Cuando se publique este post ya estaré en Tijuana, desconectada algún tiempo del internet, del blog, del messeger, de la gente, incluso de mi familia. Duele en algún lado ser tan radical como soy, pero lo que no te mata te hace mas fuerte, uno vive como puede con lo que tiene, dando lo mejor de si, así viviré hasta donde pueda.
Creo que un cambio tan grande siempre repercute en algún lado y en mi caso solo será en las letras, escribiré en un cuaderno, tal vez un día venga a enseñarles lo que es de mi, no se cuando, tal vez mas rápido de lo que espero.
No sé que decir ciertamente, estoy pasando por tantas cosas que a veces no se compartir con las personas que estimo, ya lo he dicho aquí vengo a tirar todo y ahora estoy tirando mi año sabático, mi vida de preparatoria, mi hogar por diecinueve años, mis amigos, mis conocidos y muchas circunstancias de las que no es necesario hablar.